En la pasada edición del European Bass Day 2007 vimos y probamos un buen número de bajos interesantes, desde los más tradicionales a los más radicales e innovadores.
Sin duda, uno de los que más nos gustó fue este Windmill modelo JB4 con cuerpo de fresno ligero y diapasón de arce de ojo de pájaro, así que unos días después estaba ya en la tienda a vuestra disposición. La costrucción y el concepto de este bajo son absolutamente clásicos y de primer nivel. El aspecto, con las incrustaciones con bloques negros en el diapasón, no deja lugar a dudas de la clara inspiración de los '70 de este bajo.
En cuanto a la electrónica, Windmill ha preferido optar por unas excelentes pastillas y los tradicionales controles pasivos de 2 Volúmenes y un Tono general.
Incluso antes de enchufar este bajo ya notas que la respuesta acústica es excelente, con un volumen notable. Al conectarlo lo que escuchas es simplemente uno de los mejores sonidos Jazz Bass que hemos oído últimamente, con un cuerpo envidiable, y la definición y brillo característicos de los buenos Jazz Bass de los '70. Enseguida se te vienen a la mente los sonidos de Rhonda Smith con Prince o por supuesto de Marcus Miller.
Sin duda, las pastillas Windmilll BigMag son en buena parte responsables de este enorme sonido, pero está claro que este es uno de esos casos en la que el resultado final es fruto de la combinación de todos los elementos (maderas, hardware, electrónica y construcción).