Una de las ventajas de ser distribuidores de bajos Fender Custom Shop es que podemos acceder a los mejores instrumentos de esta gran marca. Normalmente nos decantamos por modelos muy clásicos, y este es uno de ellos.
Se trata de una reedición de un Precision Bass de 1959 y por tanto incorpora los avances que el Precision había sufrido a lo largo de la década de los 50 hasta 1957 como son los rebajes y contornos del cuerpo, el uso de una pala más grande que la tipo Telecaster original (para reducir los temidos puntos muertos) así como el uso de un puente con cuatro silletas individuales para poder ajustar la altura y octavación de un modo correcto y preciso. Sin embargo, en lugar de la pastilla Split que se incorporó en 1957, este bajo viene con una pastilla no split, es decir, que esta maravilla recién salida de la división Custom Shop de Fender recrea a la perfección la magia un modelo en 1959 de transición muy poco visto.
El sonido, como puedes esperar, es grande, agresivo y cálido. Si bien los primeros modelos de Precison del '51-'53 a veces tenían un sonido un tanto "blando" que después se reforzó con la pastilla Split, en este caso la pastilla está bobinada según especificaciones del '55 y el sonido está más cercano al de una Split del '57-'59 que al de un P Bass del '51.
Tanto si tocas con dedos como con púa, este bajo entrega siempre un sonido poderoso y característico. Nos alegra cometar que el control de Tono es realmente efectivo. Con el Tono totamente abierto tienes toda la agresividad. Con el tono a mitad de recorrido el sonido se hace más cálido y todo terreno. Con el Tono totalmente recortado entras en terreno Motown y casi obtienes ese sonido de cuerdas flatwound sin necesidad de usarlas, pero además cada nota sigue teniendo presencia y definición. Increíble.
Este bajo en concreto tiene la característica de ser bastante ligero.
El color Opaque 3 Tone Sunburst es irresistible, y el acabado Relic (aparte de ser siempre un entretenido tema de debate), tiene dos ventajas:
1.- El bajo es bonito a más no poder. Recrea a la perfección el acabado clásico de un bajo de más de 50 años que ha vivido mil batallas, pero al ser nuevo el mástil está perfectamente recto, los trastes nuevos, la pastilla sonando genial, etc.
2.- El mástil desgastado es tremendamente cómodo de tocar. Es como cuando te pones tus vaqueros habituales. Parece que lleves tocándolo años incluso desde el primer momento.
Honey Blonde completan un bajo sencillamente precioso y difícil de mejorar en su terreno. Repetimos, se trata además de un Precision ligero (sólo 3.7 kg)