Descargar imagen

He aquí un bajo realmente excepcional.

Seguramente ya conozcas las revolucionarias guitarras Parker, con su característico diseño radical y sobre todo su bajísimo peso y prestaciones realmente intrersantes.

Cuando Parker se estrenó hace un par de años en el terreno de los bajos, crearon muchísima expectación.

El resultado es el Fly Bass, un bajo que comparte el diseño, tipo de construcción y bajísimo peso (3'5 Kg) y un balance excelente.

Para el cuerpo se ha usado abeto sitka, una madera que es muy habitual en guitarras acústicas para las tapas, pero no para cuerpos de instrumentos sólidos como este. Se han usado dos tapas (delantera y trasera) de arce rizado para darle un sonido más sólido y articulado, además del evidente toque estético de estas tapas.

El mástil, como ya es habitual en esta marca, es de grafito. Además de ser realmente fácil de tocar, el grafito tiene la característica de igualar el volumen entre cuerdas y de nota a nota, además de eliminar por completo los temidos "puntos muertos".

La característica pala "recortada" y las clavijas de bloqueo Sperzel hacen que el bajo no cabecee nada.
Pero ahí no acaba la cosa: a la hora de darle un sonido, además del legendario piezo Fishman (por algo Larry Fishman es socio de Ken Parker), se han incorporado dos pastillas DiMarzio Ultra Jazz con un bobinado especial y construcción tipo "stacked" (una bobina sobre otra, donde la de abajo no suena pero sí elimina ruidos). El resultado es un bajo con una paleta de sonidos impresionantes, algunos de ellos sorprendentes, PERO sin faltarle un sonido tradicional en onda Jazz Bass que será del agrado de la mayoría de los bajistas.

El previo lleva controles de Graves y Agudos para las pastillas magnéticas DiMarzio, así como un control de tono para el piezo.

Si necesitas un bajo profesional y tienes problemas con el peso y/o tocas largas sesiones, este bajo puede ser su salvación.

Con funda súper acolchada a medida.