Aquí tenemos un bajo sin trastes con un aspecto y un tacto realmente atractivos.
El diapasón sin marcas (con puntos laterales) tiene un aspecto verdaderamente elegante, e invita a tocar de un modo ligeramente diferente a otros freltess con líneas marcadas.
Para conseguir un fretless con la máxima calidad a un precio realmente asequible, Washburn ha preferido, y con muy buen criterio, que la electrónica sea sencilla (pero efectiva), con dos pastillas de bobinado simple controladas por sendos mandos de Volumen y Tono. Esto permite capturar sonidos en onda clásica, con un toque a madera siempre presente, y un ataque increíble en la pastilla del puente, ideal para flamenco, onda Jaco, etc.
De paso, el bajo viene con una construcción Neck-through, algo nada habitual en estos precios.